La compañía surcoreana
Samsung ha anunciado que pedirá la prohibición de la venta del iPhone 4S de Apple a nivel mundial en el marco de la guerra de patentes en la que están sumidas ambas compañías.
Su estreno puede verse aguado si finalmente la compañía surcoreana decide pedir legalmente la suspensión de las ventas del nuevo smartphone. De este modo, Samsung experimentaría un cambio de estrategia en su conflicto de patentes con la compañía americana.
A pesar de las demandas que Apple ha interpuesto a los surcoreanos,
la compañía de Califonia se sirve de la tecnología de Samsung para la fabricación de sus dispositivos electrónicos, como el iPhone o el iPad. De hecho,
Apple es el principal cliente de la división de semiconductores de Samsung.
Los ejecutivos de Samsung afirman que de momento no han pedido el pago de licencias por el uso de sus patentes a la compañía de la manzana mordida porque cada año les generan unos ingresos de 6.300 millones de euros, pero
advierten que esta situación podría cambiar.
Vía | rtve.es